Doma natural

La doma natural se basa en conocer al caballo, para conseguir que coopere con nosotros en vez de obligarle a que nos obedezca. Es una forma de hacer entender al caballo que aunque por naturaleza, el ser humano es un animal depredador, no tiene por que preocuparse consiguiendo así una confianza mutua que nos permita trabajar juntos. Esta forma de entrenamiento, se basa en la etología(ciencia que estudia el comportamiento y el carácter de los animales), la biomecánica(leyes de la mecánica en los seres vivos), psicología, y sobretodo en experiencias personales u observación de caballos salvajes. Los caballos son animales muy sensibles, que se comunican a través del lenguaje corporal. Si nos centramos en entender lo que nos está diciendo el caballo, en lugar de cerrarnos y centrarnos solo en lo que queremos conseguir, ignorando las señales que nos da, podremos obtener mejores resultados y mejorar nuestra relación con el animal. También son capaces de leer nuestro lenguaje corporal, saben si estamos tensos, nerviosos, asustados, tranquilos....Por eso es importante que adquiramos la sensibilidad necesaria para poder comprenderle y conseguir que él nos comprenda. Cuando el caballo percibe nuestra tensión, enfado etc , entiende nuestro comportamiento como peligroso e intenta alejarse de nosotros. En estas situaciones en las que el caballo no se encuentra cómodo, o esta nervioso sus músculos se tensan y se preparan para poder escapar.

La doma natural, evita el uso de la fuerza y de los castigos, intenta convencer al caballo haciendo que la reacción que deseamos sea la más lógica y fácil. Dado que tenemos que basar nuestra relación con el animal en la confianza, los castigos carecen de sentido, ya que lo único que producen es miedo y sensaciones desagradables o negativas. Enseña al caballo a hacer las cosas por voluntad propia en lugar de por obligación alentando al caballo y felicitando todos sus esfuerzos. De esta manera el caballo se siente bien, no se ve amenazado ni forzado a hacer algo que no quiere.